La historia de un sueño hecho realidad
La historia de la Academia Ecoresinas es la de un sueño hecho realidad.
Un sueño que responde a un propósito vital: el de ayudar a la gente.
Gente como tú, que quiere hacer bien su trabajo y labrarse un camino en su profesión (para poder vivir en paz).
Todo empezó hace mucho tiempo, cuando la familia Ubach (Ernesto, Walter y Max) decidimos iniciarnos en el mundo de la aplicación de los revestimientos continuos.
Los primeros años fueron duros. Muy duros. La cantidad de problemas a los que tuvimos que enfrentarnos fueron innumerables: grietas, fisuras, manchas, rayas…
Todos ellos derivaban de nuestra falta de experiencia y de nuestro desconocimiento sobre cómo teníamos que hacer las cosas. Y no teníamos a nadie a quien recurrir. Nadie a quien pedir ayuda.
Cosechamos fracasos. Muchos fracasos. Los clientes quedaban descontentos, sumábamos reclamaciones día tras día y perdíamos dinero a raudales.
Íbamos directos a una debacle.
Hasta que un día sucedió. Colapsamos. Enfermamos de tanto estrés, tantos problemas y tantos disgustos.
Pero, como el ave Fénix resurge de sus cenizas, nosotros resurgimos del pozo de mierda donde nos habíamos metido. Y le dimos la vuelta a la situación.
Analizamos cada derrota y sacamos aprendizajes valiosísimos. Todo lo que antes habíamos visto como un fracaso lo convertimos en la experiencia que necesitábamos para saber hacia dónde ir. Y acabamos encontrando soluciones a todos nuestros problemas.
Fundamos ecoresinas y desechamos los inconvenientes del microcemento (que nos traía de cabeza) para dar paso al producto estrella que, hoy, es la marca de la casa: MicroQuarz®.
Y, cuando parecía que ya lo teníamos todo, quisimos más.
No queríamos guardarnos para nosotros solos la sabiduría y el conocimiento conseguidos tras años de penurias. Y tampoco queríamos que nadie volviera a pasar por lo mismo que nosotros habíamos pasado.
Así que decidimos difundir nuestro conocimiento para que estuviera al alcance de todos. Y para que nadie más volviera a sentirse solo. Sin nadie a quien acudir.
Nuestro legado es la Academia Ecoresinas.
Y estos somos los héroes que, como tú, la hacemos posible cada día.
Nuestros profesores
Francis Santiago
El que no se pierde ni una
Maestro aplicador, colabora en nuestras formaciones presenciales de Sabadell.
El todoterreno del grupo: lo mismo lo encuentras pescando debajo del agua que surfeando por la nieve.
Antonio Arrufat
El hombre de acción
Maestro aplicador y responsable de la Academia Ecoresinas en Granada.
Es un luchador nato. Practica el boxeo y distintas artes marciales, pero además… ¡es cantaor!
Xavi Fuentes
El bueno de la película
Maestro aplicador, su sonrisa lo dice todo.
Cuando coge la furgo y la bici, es el hombre más feliz del mundo.
Gabriel Caiazza
El que acude cuando se le necesita
El ejemplo de un aplicador de manual. Colabora en nuestras formaciones presenciales de Sabadell.
Su día ideal podría incluir partido de pádel, asado con un buen tinto y, después, ¡sesión de Battlefield!
Walter Ubach
El que siempre está ahí
Experto técnico y de aplicación. Si silbas aparece en cualquier formación.
Los fines de semana suele irse cerca de un río: lo suyo es la pesca (y las motos).
Max Ubach
El creador de todo esto
Maestro de maestros, en la Academia lo verás por todas partes.
Tiene la casa llena de instrumentos musicales, pero lo que de verdad le gusta es escaparse a la naturaleza.
Nuestros profesores
Gabriel Caiazza
El que acude cuando se le necesita
El ejemplo de un aplicador de manual. Colabora en nuestras formaciones presenciales de Sabadell.
Su día ideal podría incluir partido de pádel, asado con un buen tinto y, después, ¡sesión de Battlefield!
Francis Santiago
El que no se pierde ni una
Maestro aplicador, colabora en nuestras formaciones presenciales de Sabadell.
El todoterreno del grupo: lo mismo lo encuentras pescando debajo del agua que surfeando por la nieve.
Antonio Arrufat
El hombre de acción
Maestro aplicador y responsable de la Academia Ecoresinas en Granada.
Es un luchador nato. Practica el boxeo y distintas artes marciales, pero además… ¡es cantaor!
Xavi Fuentes
El bueno de la película
Maestro aplicador, su sonrisa lo dice todo.
Cuando coge la furgo y la bici, es el hombre más feliz del mundo.
Walter Ubach
El que siempre está ahí
Experto técnico y de aplicación. Si silbas aparece en cualquier formación.
Los fines de semana suele irse cerca de un río: lo suyo es la pesca (y las motos).
Max Ubach
El creador de todo esto
Maestro de maestros, en la Academia lo verás por todas partes.
Tiene la casa llena de instrumentos musicales, pero lo que de verdad le gusta es escaparse a la naturaleza.